SUGERENCIAS PARA QUE LOS NIÑOS (Y ADULTOS) NO DESCONECTEN TOTALMENTE DE LA NATURALEZA DURANTE EL CONFINAMIENTO

En algún Boletín Electrónico hemos hecho colaboraciones, desde Zaragoza Deporte Municipal, que incidían en las ventajas y beneficios del denominado “Ejercicio Verde”, aquel que niños, adultos y mayores pueden desarrollar en un entorno natural, sea urbano o rural.

En estos artículos hemos valorado las diferencias y el valor añadido que supone para la salud física, mental y emocional el desarrollar la actividad en la naturaleza.

En estos tiempos de pandemia y coronavirus, hemos echado una ojeada a las propuestas europeas y americanas que sugieren lo importante de no perder el contacto con la naturaleza en medio de una limitación tan drástica y limitante como es la confinación. Aquí van algunas ideas que hemos encontrado:

1.- En la medida de lo posible, establecer una “ventana de observación”, evidentemente mucho mejor si se dispone de balcón o terraza. Instalar varias sillas para que niños y padres puedan observar bien.

2.- Localizar elementos de la naturaleza visibles desde esa ventana, estimular y agudizar la visión y imaginación: el cielo, un árbol, un jardín, una fuente, unas macetas de otro balcón próximo, etc.

3.- El acomodarse familiarmente en el “puesto de observación”, conlleva alternar conversación con tiempos de silencio. El silencio induce a  niños  y adultos a sentimientos de relajación profunda, asombro y vitalidad y lo aleja de un mundo exterior, en estos momentos, muy alterado.

4.- Investigar la parte de la naturaleza que tenemos a nuestro alcance como una forma entretenida de exploración: ¿qué especie es ese árbol? ¿A qué hora atardece? ¿Hay estrellas visibles? ¿Disponemos de un termómetro exterior para poder anotar la evolución de la temperatura?  Quizás sería divertido hacer un cuaderno común de campo en el que estos días niños y padres puedan documentar, a su estilo y manera, estas sencillas actividades.

5.- Dibujar y colorear los elementos de la naturaleza que tenemos a nuestra vista y los que podamos imaginar con la finalidad de recrear un espacio amable y natural junto a nuestro “puesto de observación”

6.- Si se tiene mascota en el hogar, se puede realizar el diario de la mascota o una ficha de la misma, indicando sus hábitos de comida, de juego, de sueño, sus momentos de soledad, motivos de enfado, etc... Si no se tiene mascota propia, pero se conoce la mascota de algún familiar o/y amigo, también se puede realizar esta actividad

7.- Fomentar, estos días de confinamiento, todas las acciones que tengan la naturaleza como protagonista: cuentos cuya trama se desarrolle en el medio natural, dibujos o vídeos relacionados con la naturaleza, música con sonidos de la naturaleza y jugar a identificar sonidos, documentales adaptados a su edad, etc.

En la actualidad hay numerosos recursos de todo tipo en la Red con los que, con un poco de voluntad y estimulando la capacidad de ingenuidad y asombro de los niños, pueden ayudarle a no desconectar totalmente con elementos naturales, por simples que sean, favorecer la atención plena y , de paso, divertirse y pasar momentos amables y distendidos en familia.

Fuentes:

Red Children and Nature . Conectando niños y naturaleza

National Geographic