PONERSE A PUNTO PARA EVITAR LESIONES PRACTICANDO ESQUÍ

Los próximos días se abrirá oficialmente la temporada de esquí. Miles de aficionados a este deporte volverán a deslizarse por las pistas, practicando una disciplina que cautiva cada vez a más personas. “Un deporte ideal para practicar junto a amigos, familia y que nos permite disfrutar del medio natural”, recuerda Fran Mata, quien participó en el programa Escúchate de Aragón Radio este martes.

En la colaboración semanal del COLEFA en la radio autonómica aragonesa se abordó en esta ocasión la necesidad de prepararse para la nueva temporada de esquí. “Lo primero que tenemos que hacer es realizar una puesta a punto, lo que nos ayudará a evitar lesiones, especialmente cuando llevamos mucho tiempo de inactividad”, recordó Mata.

Es necesario tener muy en cuenta que el esquí es un deporte muy exigente a nivel articular y muscular, especialmente para nuestras rodillas y nuestros cuádriceps. Por ello es importante preparar previamente nuestra musculatura (Cuádriceps, glúteos y aductores) y de manera importante los Isquiotibiales. “Estos últimos son unos músculos que se encuentran en la parte posterior del muslo y que realizan una gran labor, ya que son los principales estabilizadores de la rodilla”. Trabajarlos adecuadamente son un “auténtico seguro de vida para los ligamentos de nuestras rodillas, sobre todo cuando practicamos esquí y snowboard”, lo que prevendrá en buena medida que se puedan provocar lesiones importantes.

Fran Mata también recordó que practicando estos deportes son constantes las “contracciones excéntricas, que se producen cuando un músculo se contrae para frenar algún tipo de fuerza, a la vez que se está estirando”. Este tipo de situaciones se producen también en nuestra vida cotidiana, por ejemplo, al bajar las escaleras. Esquiando, los cuádriceps sufren este tipo de contracciones continuamente, “en los giros o al absorber las irregularidades del terreno. Por eso conviene prepararlos antes”.

Muchas son las posibilidades para preparar nuestros músculos y articulaciones ante este tipo de esfuerzos, para ello es muy recomendable el trabajo de propiocepción. “Por medio de estos ejercicios nuestros músculos, tendones y ligamentos cogen experiencia y aprenden cómo tienen que actuar para estabilizar la articulación, que es lo que luego tendrán que hacer constantemente en las pistas como respuesta ante cualquier imprevisto”, apuntó Mata.

Además, podemos hacer otro tipo de ejercicios en el gimnasio, en la piscina, cuando salimos a trotar o incluso en casa. Para ello podemos bajar corriendo cuestas con poca pendiente o realizar ejercicios de patadas en la piscina. “En el caso de que no realicemos ninguna de estas actividades, también podemos practicar este tipo de ejercicios de un modo muy sencillo, sustituyendo el ascensor por bajar por las escaleras para el trabajo excéntrico o incluso trabajando la propiocepción en nuestra propia casa descalzos sobre un cojín”.

Mata también recordó los momentos clave a la hora de evitar lesiones en la montaña: “En las primeras bajadas, cuando todavía no hemos calentado, y al final de la jornada, cuando la fatiga aumenta y disminuye la coordinación”. Sin olvidar la importancia de una correcta hidratación.

En todo caso, ante cualquier duda la mejor opción siempre es consultar con un Educador Físico, quien nos podrá aportar su experiencia y visión profesional para poder disfrutar de nuestro deporte favorito.

La entrevista completa se puede escuchar en el siguiente enlace: http://www.aragonradio.es/radio?reproducir=149524

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