CAEN DOS HISTÓRICOS DEL FÚTBOL ARAGONÉS.
Fuente:
Diario EQUIPO
Hablar del fútbol aragonés en las últimas décadas sin salir a colación en alguna conversación los nombres de David Alcayne o Antonio Gonzalvo era algo muy normal. Ambos son dos ilustres de nuestro fútbol y han colaborado de maneraostensible a elevar su nivel.
Uno, David Alcayne, más dedicado a la figura de coordinador, que alternaba cuando la situación lo requería con la de técnico. Otro, Antonio Gonzalvo, formando innumerables generaciones de jugadores en los banquillos de Real Zaragoza y Stadium Casablanca. Los dos, pese a que seguirán paseándose por los campos de Aragón, han dejado de pertenecer a las disciplinas de San Gregorio y El Olivar, respectivamente, decisión que los dirigentes han tomado pensando en el bien de sus clubes.
La tarde del pasado lunes protagonizó un parón en sus extensas trayectorias en el fútbol base de nuestra ciudad. Ambos fueron destituidos de sus cargos antes de concluir la temporada y afrontan una etapa nueva, la de estar inactivos, que no va con su manera de ser y que no les va a impedir seguir pensando en nuevos proyectos. Para el extécnico olivarero, que cumplía su primera temporada en El Olivar, «me ha venido de sorpresa. No lo esperaba porque lo más importante era el trabajo que se estaba haciendo», admitió Gonzalvo, asegurando que no ha habido problemas para la rescisión del contrato. «Se ha llegado a un acuerdo rápido. Es la primera vez que me pasa pero sé que es algo del fútbol. No hay ningún problema con nadie y estoy contento con la actitud en partidos y entrenamientos de todos los jugadores».
El caso de David Alcayne es algo más raro ya que el excoordinador del club de La Azucarera, muy afectado por la destitución, se encontraba diseñando y planificando la temporada 2009-10 del club, tras haberlo acordado con la directiva rojilla no hacía ni dos semanas. «No quiero hablar en este momento ya que todavía no he asimilado la noticia. Pese a todo, agradezco a toda la gente del San Gregorio los diez años que he pasado allí», apuntó.
Los dos mantienen intacta su ilusión por seguir ligados al fútbol, casi el 70% de sus vidas. Sus currículos hablan por sí solos. Son historia viva del fútbol base aragonés y les queda cuerda para rato. Proyectos nos les faltarán para continuar haciendo lo que más les gusta.