LA CONTUNDENCIA EN DEFENSA DA SUS FRUTOS

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13/09/2009

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Sport Equipo

Pablo capitaneó el gran juego defensivo del CAI Aragón, que echó en falta en ataque a Larsson

Un vistazo al luminoso del Príncipe Felipe al término del encuentro bastaba para hacer un resumen de lo que había sido el primer encuentro de la liga Asobal: CAI 21 - Pilotes 19. Un resultado tremendamente escueto para tratarse de la mejor liga del mundo.

El partido fue una sucesión de imprecisiones en ataque, pero también un clinic de contundencia defensiva, sobre todo la segunda mitad de los pupilos de Mariano Ortega, que pararon una tras otra las acometidas gallegas.

Detrás de la muralla naranja estaba bajo los palos Pablo Hernández. El aragonés hizo paradas de todos los colores: con la mano, el brazo, la pierna. Y suyo fue el momento del partido. Con empate a 19 en el marcador, Prendes robó un balón en la frontal, paso a Stankovic -el otro protagonista del encuentro con 7 dianas- que anotó. El siguiente ataque gallegó, ¿saben dónde acabó? Correcto. En las manos de Pablo. Delirio en el pabellón y la primera victoria en el zurrón.

Mariano Ortega tuvo que tirar de Amadeo Sorli en la posición de central ante las bajas de Larsson y Ruiz Casanova. El pequeño extremo cumplió con creces en su posición y ante la falta de fuerza física, tiró de fintas e inteligencia para salvar a los centrales gallego, con varios centímetros más que el aragonés.

Al final, un partido difícil de ver, sobre todo la segunda mitad (7-8 en 30 minutos), pero que da los primeros dos puntos al CAI.