FIESTA EN MORA DE RUBIELOS

En ningún núcleo urbano de Aragón se vive el balonmano con tanta intensidad como en Mora de Rubielos. Unas 1.300 personas se encuentran censadas en el pueblecito turolense. De ellas, alrededor de 100 han tramitado una licencia federativa para jugar a balonmano. Esto es, casi un 10% de su población. Ni en la cuna del balonmano, ni en Granollers, se alcanzan estos porcentajes de militancia activa en el balonmano. Tanta pasión, tanto amor por este deporte, merecía una fiesta como la que hoy se vivirá en la localidad, con el encuentro entre el CAI Aragón y el Cuenca (19.30).

Están de estreno en Mora. Por fin disfrutan en el pueblo de una pista de madera en el pabellón. Así, ahora Joaquín Novella podrá entrenar los siete equipos federados del pueblo. Chicos y chicas, desde prebenjamines a sénior. En invierno, se meten entre pecho y espalda más de 400 kilómetros cada fin de semana para ir y venir a jugar con los equipos de Zaragoza. En los veranos, la Federación Aragonesa organiza en la localidad un campus que coordina el jugador internacional del Barça Demetrio Lozano. Con frío o con calor, siempre balonmano.

En una fecha tan señalada, la pena es que Alfonso Novella no pueda jugar en su pueblo esta tarde. El ex jugador del CAI Aragón firmó el pasado domingo por el Almoradí de la División de Honor B. Caso semejante al de Guillermo Ros, ahora jugador del Moguer. El CAI Aragón comparecerá con el objetivo de acelerar su preparación para la Liga Asobal. Los tres ensayos anteriores (Naturhouse, Obearagón y Reyno de Navarra) se aproximan más a la incertidumbre que a la certidumbre. La situación resulta lógica considerando el inicio de la nueva singladura. Un entrenador nuevo y unos jugadores nuevos pretenden hacer un equipo nuevo. Falta cohesión, acoplamiento. En cualquier caso, se impone una reacción que transmita confianza. El Cuenca significa un buen elemento para contrastar la evolución del CAI. El cuadro de Goran Dzokic viene de perder ante el Guadalajara de Fernando Bolea (31-26), pero sigue contando con jugadores de la valía de Grosas o Nilsson.

El CAI pretende mostrar un nuevo rostro. Se aprecia mayor fortaleza en la portería. Las neuronas de Larsson son esenciales para aportar orden en la construcción del juego. Todos los demás, sin excepción, deben sumar. Hay brazos poderosos, pivotes de indiscutible valía, extremos contrastados. Pero nada se conseguirá si todo este potencial no lo logra plasmar Mariano Ortega en la pista. Hoy es un magnífico día para empezar a reflejarlo ante los ojos de la gente maravillosa de Mora de Rubielos.