Esquí nórdico como entrenamiento invernal para corredores

ESQUÍ NÓRDICO COMO ENTRENAMIENTO INVERNAL PARA CORREDORES

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15/12/2014 12:20:00

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Blog «La Bolsa del Corredor» - Diario Sport

Con el inicio de la temporada de esquí, una de las actividades aeróbicas más practicadas en la montaña es el esquí de fondo. El nivel de transferencia de beneficios del esquí nórdico al atletismo o al triatlón es muy elevado, por lo que es un magnífico método de entrenamiento invernal.

El esquí de fondo o esquí nórdico, junto con la natación, es uno de los deportes más completos que existen. Trabajo aeróbico puro y duro. Practicado a nivel de entrenamiento, buscando obtener un rendimiento físico, se convierte en un exigente trabajo de resistencia ya que para avanzar sobre la nieve hay que poner en marcha diversos grupos musculares a la vez: piernas, brazos y tronco trabajan prácticamente al mismo nivel de exigencia. Sin embargo, todo lo que tiene de duro a nivel cardíaco, lo tienen de suave para nuestros músculos, tendones y articulaciones ya que el cuerpo trabaja armónicamente sin tensiones y lo que es mejor, sin impacto.

El esquí de fondo nace en los países nórdicos por la necesidad de desplazarse sobre la nieve durante el invierno. El objetivo del esquí nórdico no es correr con esquís, si no deslizarse lo máximo posible sobre la nieve intentando optimizar el esfuerzo, lo que permite cubrir largas distancias en relativamente poco espacio de tiempo. Al contrario que en el esquí alpino, en el que para desplazarnos nos valemos principalmente de la gravedad, en el nórdico avanzamos gracias a la impulsión que ejercemos nosotros mismos ya sea sobre llano o en las subidas.

El nivel de transferencia de beneficios del esquí nórdico al atletismo o al triatlón es muy elevado, por lo que es un magnífico método de entrenamiento invernal:

  • Trabajo aeróbico: aumento del consumo de oxigeno y de la capacidad pulmonar (niveles de VO2max más altos que en cualquier otro deporte).
  • Se realiza en altura con los beneficios que eso conlleva: aumento de los niveles de hematocrito en sangre.
  • Aumento del tono muscular: trabajamos gemelos, soleos, cuadríceps y glúteos en el tren inferior y, al utilizar los palos también ejercitamos el a menudo olvidado tren superior con la movilización de trí­ceps, deltoides y hombros. Del tronco echamos mano de pecho, espalda, dorsales, lumbares y abdominales.
  • Bajo nivel lesivo: al no tener impacto, las articulaciones sufren menos (entrenamiento ideal si se está lesionado).
  • Se trabajan otras habilidades como el equilibrio, la coordinación y la propiocepción.
  • Cambiar de entorno: relación mucho más estrecha con la naturaleza, aumento de sensaciones. Estaciones ubicadas en parques naturales, muy poco masificadas y un ambiente distendido.

¿Estilo clásico o estilo Patinador?
Si bien se puede alcanzar un nivel básico con cierta rapidez, para practicar el esquí nórdico se requiere una cierta técnica, por lo que es conveniente y recomendable no ser autodidacta al principio y realizar clases con algún monitor experimentado, progresando así más rápidamente en nuestro aprendizaje.

Para los corredores que os aventuréis a probar este deporte, os aconsejamos empezar aprendiendo la técnica del estilo clásico, trabajando el equilibrio como base fundamental de la técnica y el deslizamiento alternativamente sobre cada esquí (imitando el gesto cuando andamos o corremos). En esta modalidad nos deslizamos mediante unas trazas y los esquís tienen unas escamas en la parte media de la suela que se adhieren a la nieve y nos permiten realizar la impulsión y evitar que retrocedamos.

El estilo patinador, como indica su nombre, se parece a la técnica del patinaje en linea. La impulsión no es hacia el frente como en el clásico, si no a izquierda y derecha. Esta técnica es un poco más agresiva que la clásica, pero con la técnica adecuada permite alcanzar mayores velocidades con un esfuerzo similar. La técnica del patinador es la modalidad que suele usarse en las triatlones blancas.